Christian Lindner ministro alemán de Economía informa del rechazo del Gobierno alemán. (Foto: Wikimedia)

Alemania no quiere la prohibición europea de la gasolina y el diésel

Compartir en:
La Comisión Europea aprobó la prohibición de vender vehículos nuevos que funcionen con gasolina y diésel, con la finalidad de tener en la calle coches menos contaminantes para el medioambiente.

Ante esta decisión, el ministro de Economía, Christian Lindner, indica el rechazo por parte de Alemania sobre esta legislación europea. 

¿A qué se niega Alemania?

El Parlamento Europeo votó hace unos días para prohibir que, en el año 2035, se prohíba la venta de nuevos coches de gasolina y diésel. 

Aunque el voto del parlamento no es vinculante, permitiendo a los estados miembros tomar la decisión final con el voto de sus ministros, ya se conoce la negativa por parte de Alemania de aceptar esta propuesta.

El rechazo del país alemán lo comunicó Christian Lindner, el ministro de Economía, bajo la explicación de que hay varias regiones en el mundo donde la movilidad eléctrica no es la mejor alternativa en las próximas décadas.

Señala que la prohibición de la matriculación de coches nuevos de motores de combustión provocará que esta tecnología no se desarrolle más en los países europeos, lo cual puede ser un error.

De igual manera, el ministro de Transportes, Volker Wissing, apuntó que la prohibición de su venta no es razonable. Incluso recomendó la opción de usar combustibles sintéticos para disminuir las emisiones de CO2. 

¿Cómo afecta a la industria del motor alemana?

En caso de que la prohibición se aprobara en Alemania, ya que Lindner es solo un miembro del partido Demócratas Libres donde hay contradicciones entre los miembros, el país está obligado a acelerar los planes de electrificación.

Ante este escenario, los grupos de presión advierten que la aceleración de los planes de electrificación provocará la pérdida laboral de miles de puestos de trabajos. Con un total de 830.000 puestos en peligro en la próxima década.

Además, la Asociación Alemana de la Industria Automotriz, indica que esta decisión va en contra de los ciudadanos, el mercado y la innovación. 

Los países que se niegan

Aparte de Alemania, hay otros cinco países que se niegan a la prohibición de los coches de combustión para el 2035, entre los cuales se encuentra Portugal, Italia, Bulgaria, Eslovaquia y Rumanía.

Los cinco países ponen sobre la mesa una alternativa al Parlamento Europeo. Reducir un 90 % los coches de turismo para el 2035, favoreciendo las emisiones de CO2 al medio ambiente. Para el año 2040, reducir los vehículos de turismo el 100 %.

Para los coches comerciales ligeros, proponen una bajada del 80 % para el 2035 y del 100 % para el 2040.

La finalidad de estas propuestas es que la prohibición de los coches de combustión se realice dentro de períodos de transición adecuados y personalizados para cada país europeo. También promueven considerar los factores sociales y económicos, incluyendo el poder adquisitivo de cada país europeo, donde existen más diferencias.
Compartir en: