Cuáles son los colores que menos devalúan el precio de un coche
La importancia del color
Cuando se piensa en el precio de un coche de segunda mano, se suele pensar en factores como el kilometraje, la cantidad de dueños que tuvo y el número de reparaciones que atravesó. El color suele considerarse algo meramente estético. Sin embargo, cada tonalidad presenta una depreciación económica distinta del vehículo.
iSeeCars, el comparador de vehículos, analizó el precio de 650 mil coches con tres años de uso en los Estados Unidos. En este estudio comprobaron que el color está directamente relacionado con su valuación futura. Por lo que recomiendan que los consumidores escojan con cuidado el color si planean venderlo en el futuro.
Color y devaluación
Todos saben que los coches se devalúan, apenas salen del concesionario. De media, un vehículo pierde el 33 % de su valor durante sus tres primeros años de uso. Este porcentaje se ve afectado, también, por su tonalidad.
Esto se debe, en parte, a que los colores neutrales como el blanco, el negro y el gris tienen plazos de entrega menores. Además, es más sencillo realizar arreglos sobre la carrocería. Algo similar ocurre para las empresas que optan por colores neutrales para sus flotas: lo hacen porque pueden obtener mejores precios.
Qué color debes elegir
Según el estudio que se realizó, los colores más habituales, a diferencia de lo que se podría pensar, son los que más depreciación sufren. Mientras que los colores más raros y extravagantes, menos valor pierden.
El amarillo es uno de los colores que mejor conserva su valor con una depreciación en torno del 4 %. Es uno de los colores menos populares y utilizado para automóviles deportivos. Debido a que llaman la atención en el mercado de segunda mano, los consumidores están dispuestos a pagar más por ellos.
El naranja es el próximo color en la lista con una depreciación del 10 %. Al igual que el amarillo, pocos vehículos se encuentran en esta tonalidad, además de ser un color mayormente elegido en los coches deportivos o muscle car, además de los modelos de edición limitada.
Otros colores extravagantes, pero que no conservan su valor, son el dorado con una depreciación del 16 % y el marrón con 18 %. Por lo que se puede apreciar cómo la rareza por sí sola no es un resguardo de valor. En estos casos, al ser colores que los compradores evitan, daña el precio de la reventa, aunque sean poco comunes.
Dentro de la media de depreciación en torno al 15 % se encuentran colores como el violeta, el verde, el rojo, el gris y el plateado. Más allá de la media se encuentran el blanco y el negro.
¿Influye el color en la póliza de seguro?
La leyenda urbana que relata la influencia del color en la póliza de seguro ha sido negada por las principales aseguradoras. Añadieron que consideran para la póliza la potencia del vehículo, la experiencia del conductor principal y las estadísticas relacionadas con la edad de quien conduce y la ubicación geográfica. En resumen, el color no influye en absoluto en la prima del seguro.
Cuando se piensa en el precio de un coche de segunda mano, se suele pensar en factores como el kilometraje, la cantidad de dueños que tuvo y el número de reparaciones que atravesó. El color suele considerarse algo meramente estético. Sin embargo, cada tonalidad presenta una depreciación económica distinta del vehículo.
iSeeCars, el comparador de vehículos, analizó el precio de 650 mil coches con tres años de uso en los Estados Unidos. En este estudio comprobaron que el color está directamente relacionado con su valuación futura. Por lo que recomiendan que los consumidores escojan con cuidado el color si planean venderlo en el futuro.
Color y devaluación
Todos saben que los coches se devalúan, apenas salen del concesionario. De media, un vehículo pierde el 33 % de su valor durante sus tres primeros años de uso. Este porcentaje se ve afectado, también, por su tonalidad.
Esto se debe, en parte, a que los colores neutrales como el blanco, el negro y el gris tienen plazos de entrega menores. Además, es más sencillo realizar arreglos sobre la carrocería. Algo similar ocurre para las empresas que optan por colores neutrales para sus flotas: lo hacen porque pueden obtener mejores precios.
Qué color debes elegir
Según el estudio que se realizó, los colores más habituales, a diferencia de lo que se podría pensar, son los que más depreciación sufren. Mientras que los colores más raros y extravagantes, menos valor pierden.
El amarillo es uno de los colores que mejor conserva su valor con una depreciación en torno del 4 %. Es uno de los colores menos populares y utilizado para automóviles deportivos. Debido a que llaman la atención en el mercado de segunda mano, los consumidores están dispuestos a pagar más por ellos.
El naranja es el próximo color en la lista con una depreciación del 10 %. Al igual que el amarillo, pocos vehículos se encuentran en esta tonalidad, además de ser un color mayormente elegido en los coches deportivos o muscle car, además de los modelos de edición limitada.
Otros colores extravagantes, pero que no conservan su valor, son el dorado con una depreciación del 16 % y el marrón con 18 %. Por lo que se puede apreciar cómo la rareza por sí sola no es un resguardo de valor. En estos casos, al ser colores que los compradores evitan, daña el precio de la reventa, aunque sean poco comunes.
Dentro de la media de depreciación en torno al 15 % se encuentran colores como el violeta, el verde, el rojo, el gris y el plateado. Más allá de la media se encuentran el blanco y el negro.
¿Influye el color en la póliza de seguro?
La leyenda urbana que relata la influencia del color en la póliza de seguro ha sido negada por las principales aseguradoras. Añadieron que consideran para la póliza la potencia del vehículo, la experiencia del conductor principal y las estadísticas relacionadas con la edad de quien conduce y la ubicación geográfica. En resumen, el color no influye en absoluto en la prima del seguro.
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