Toyota desarrolla un prototipo de cartucho de hidrógeno portátil
La compañía Toyota está entre esos que tienen esa opinión, y esto, lo está demostrando con hechos tangibles.
La compañía japonesa está diseñando unos cartuchos de hidrógeno. Se trata de unos dispositivos portátiles que son unos de los desafíos de cara al transporte y el uso diario.
Cartuchos de hidrógeno portátiles
Toyota, junto con la compañía Woven Planet, ha presentado el primer prototipo de cartucho portátil. Es un simple cilindro de unos 400 mm de largo y 180 mm de diámetro con un peso de 5 kilos cuando está lleno. Tiene un asa pequeña para que sea fácil el traslado y puede almacenar hasta 3,3 kilovatios de energía por hora.
El funcionamiento del sistema
Una de las ventajas principales es que el sistema no requiere de una gran infraestructura para funcionar. Además, el hecho de que sean cartuchos intercambiables en cuestión de segundos.
Podemos alimentar coches, motos, drones, calefacción o incluso casas que no estén conectadas a la red eléctrica.
Lógicamente, primero llegará al usuario japonés, pero la idea es que esta sea una tecnología que llegue fácilmente a todo el mundo.
Estamos en una etapa temprana aún
Eso sí, todavía no estamos en esas, ya que el proyecto se encuentra aún en una fase temprana. La compañía no ha especificado todavía cómo funcionarán las estaciones de repostaje. Además, los cartuchos funcionarán con combustión de hidrógeno o con pilas de combustible, aunque eso tampoco lo sabemos todavía.
La marca japonesa está muy comprometida con el proyecto, por lo que están metiendo todos los recursos disponibles.
En la ciudad japonesa de Shizuoka se está construyendo Woven City, que es la ciudad donde se probarán estos cartuchos.
Medio ambiente
Debemos señalar que estos cartuchos tienen una buena relación con el medio ambiente, ya que no son contaminantes. El uso de este hidrógeno no genera emisiones de dióxido de carbono. El “pero” en este sentido viene porque este hidrógeno se obtiene de combustibles fósiles y este proceso si es nocivo para el medio ambiente.
Se están trabajando en métodos alternativos para este proceso, como es el caso de la electrólisis, donde se usa la corriente eléctrica para separar el hidrógeno del oxígeno que hay en el agua. Si el uso de esta electricidad necesaria se produce mediante fuentes renovables, el proceso no emite nada de CO2.
El problema es que esto aún no está muy desarrollado, y este es el principal escollo que tenemos actualmente.
Si desde Toyota, (o desde cualquier otro lugar) se consigue superar este obstáculo, es posible que no tardemos mucho tiempo en cambiar las visitas a gasolineras por estos cartuchos. Este futuro no es solo aplicable a los coches eléctricos, sino a cualquier otro elemento.
Y es que el futuro ya está aquí, como dicen muchos medios, y esta es una prueba de ello. Previsiblemente, aún tardaremos un tiempo en verlo, pero estamos en el camino, lo que nos llevaría a solucionar muchos problemas globales con la energía.
La compañía japonesa está diseñando unos cartuchos de hidrógeno. Se trata de unos dispositivos portátiles que son unos de los desafíos de cara al transporte y el uso diario.
Cartuchos de hidrógeno portátiles
Toyota, junto con la compañía Woven Planet, ha presentado el primer prototipo de cartucho portátil. Es un simple cilindro de unos 400 mm de largo y 180 mm de diámetro con un peso de 5 kilos cuando está lleno. Tiene un asa pequeña para que sea fácil el traslado y puede almacenar hasta 3,3 kilovatios de energía por hora.
El funcionamiento del sistema
Una de las ventajas principales es que el sistema no requiere de una gran infraestructura para funcionar. Además, el hecho de que sean cartuchos intercambiables en cuestión de segundos.
Podemos alimentar coches, motos, drones, calefacción o incluso casas que no estén conectadas a la red eléctrica.
Lógicamente, primero llegará al usuario japonés, pero la idea es que esta sea una tecnología que llegue fácilmente a todo el mundo.
Estamos en una etapa temprana aún
Eso sí, todavía no estamos en esas, ya que el proyecto se encuentra aún en una fase temprana. La compañía no ha especificado todavía cómo funcionarán las estaciones de repostaje. Además, los cartuchos funcionarán con combustión de hidrógeno o con pilas de combustible, aunque eso tampoco lo sabemos todavía.
La marca japonesa está muy comprometida con el proyecto, por lo que están metiendo todos los recursos disponibles.
En la ciudad japonesa de Shizuoka se está construyendo Woven City, que es la ciudad donde se probarán estos cartuchos.
Medio ambiente
Debemos señalar que estos cartuchos tienen una buena relación con el medio ambiente, ya que no son contaminantes. El uso de este hidrógeno no genera emisiones de dióxido de carbono. El “pero” en este sentido viene porque este hidrógeno se obtiene de combustibles fósiles y este proceso si es nocivo para el medio ambiente.
Se están trabajando en métodos alternativos para este proceso, como es el caso de la electrólisis, donde se usa la corriente eléctrica para separar el hidrógeno del oxígeno que hay en el agua. Si el uso de esta electricidad necesaria se produce mediante fuentes renovables, el proceso no emite nada de CO2.
El problema es que esto aún no está muy desarrollado, y este es el principal escollo que tenemos actualmente.
Si desde Toyota, (o desde cualquier otro lugar) se consigue superar este obstáculo, es posible que no tardemos mucho tiempo en cambiar las visitas a gasolineras por estos cartuchos. Este futuro no es solo aplicable a los coches eléctricos, sino a cualquier otro elemento.
Y es que el futuro ya está aquí, como dicen muchos medios, y esta es una prueba de ello. Previsiblemente, aún tardaremos un tiempo en verlo, pero estamos en el camino, lo que nos llevaría a solucionar muchos problemas globales con la energía.
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